dl | ponferrada 13/08/2012
La empresa Ribada y La Oricera, dedicada a la elaboración de productos artesanales de repostería y aperitivos, prepara para el próximo mes de octubre el lanzamiento de su nuevo producto, unas galletas de castaña del Bierzo elaboradas con harina obtenida de este fruto autóctono de la comarca. Se trata de la nueva apuesta de la sociedad familiar fundada por Enrique Fernández y su mujer, Ana, que cuenta como «artículo estrella» con sus tartas y sus magdalenas elaboradas con castaña de pared, una raza común en el Bierzo caracterizada por su menor tamaño.
En este sentido, el responsable de Ribada y La Oricera explicó a Europa Press que se trata de un tipo de castaña «poco apreciada por el mercado» debido a su envergadura, pero que cuenta con unas propiedades «mejores» tanto en el sabor como en el pelado, a pesar de lo cual «el mercado se decanta siempre por aquellas de mayor calibre».
Así, la empresa afincada en Balboa se dedica a la compra-venta de castañas bercianas, las cuales además ha comenzado cultivar en una pequeña plantación de entre dos y tres hectáreas de superficie, mientras que aquellas de menor tamaño y, por lo tanto, «más difíciles de comercializar», son las utilizadas por Ribada y La Oricera para elaborar sus productos artesanales. Entre estos se encuentran mermeladas, castañas pilongas, harina de castaña, erizos de castañas, crema de castaña o castañas en almbíbar, así como una crema con cacao que, según su creador, «es como Nocilla, pero con castaña en lugar de avellana».
La empresa berciana incluye en su catálogo mermeladas de cereza, pera, ciruela, naranja, mora, zanahoria y piñones, y arándanos; miel; pimientos; cerezas conservadas en aguardiente, y otras creaciones reposteras como bizcochos, todas ellas «con productos naturales de la zona y sin conservantes, tal y como enseña la tradición».
Es precisamente la falta de conservantes lo que dificulta la exportación de los transformados de fruta, ya que sin ellos «no es fácil lograr una fecha de caducidad amplia». No obstante, Ribada y La Oricera prepara ya el salto a los mercados internacionales, con la venta de castañas frescas en Francia, con lo que la empresa espera «compensar» los problemas de pago de algunos clientes en España.
Actualmente, la empresa berciana factura al año entre 200.000 o 300.000 kilos de castañas frescas y entre 20 y 25 toneladas de productos elaborados, unas cifras con las que hace «frente a la crisis»